miércoles, 1 de octubre de 2008

El angel exterminador

"Si el filme que van a ver les parece enigmático e incoherente, también la vida lo es. Es repetitivo como la vida y, como la vida, sujeto a múltiples interpretaciones. El autor declara no haber querido jugar con los símbolos, al menos conscientemente. Quizá la explicación de El ángel exterminador sea que, racionalmente, no hay ninguna." Con esta frase Luis Buñuel presenta su película El ángel exterminador. Como se dice, la película puede parecer incoherente, pero mantiene siempre un cierto encanto, un cierto misticismo inexplicable, como en todo el cine de Luis Buñuel. Surrealista, inexplicable, película realmente única.

La historia versa sobre un grupo de personas de clase alta, burguesía aristocrática (un tema que parece perseguir Buñuel) que se ven encerrados inexplicablemente en un salón de la casa de una de las parejas del grupo. Esta premisa no se presenta como una fantasía, o como un embrujo, sino simplemente como una condición para desarrollar la película, sin los miramientos sobrenaturales, sino como una simple expoliación de la situación. A partir del encierro se dan una serie de situaciones en las que cada uno de los individuos (cada uno un verdadero exponente ejemplar de las llamadas reglas cordiales de etiqueta que tanto se presumen en tales esferas sociales) va degradandose hasta llegar, unos antes que otros, al comportamiento salvaje casi animal. Los únicos que no llegan a ese estado brutal de bestialidad (aun condicionado por las reglas sociales de comportamiento en cierta medida) son aquellos que mueren. La excases de comida y agua, la ausencia de soledad (paradójico, pero una persona privada de su intimidad, de su soledad, no puede mantener la cordura por mucho tiempo) van dejando ver que en el fondo todos somos animales, y que las reglas sociales de comportamiento llegan incluso a suprimir nuestros deseos y nuestros sentimientos hacia las otras personas. Una vez que estos individuos se ven separados de su entorno normal, una vez las reglas sociales dejan no son mas pertinentes (porque se ven encerrados en una nueva microsociedad que solo les atañe a ellos) se ven perdidos, y optan por el comportamiento egoísta del instinto de conservacion.

El film esta lleno de elementos que a veces dan la impresión de un simbolismo especifico. Existe a lo largo de la película ciertas repeticiones (a primera vista podrían parecer errores de montaje), o ciertos elementos de orden religioso (el sacrificio de los corderos, el mismo ángel exterminador), e incluso algunos elementos marxistas (la posición entre sirvientes que escapan de la casa sin razón aparente y la burguesía atrapada y aislada). Sin embargo, Buñuel trabaja de una forma instintiva. Luis Buñuel no trabaja concienzudamente sobre la base de símbolos.

La película es definitivamente una opción itneresantisima de cine mexicano (producción mexicana que nada tiene que ver con el cine mexicano común para esa época). Al mejor estilo narrativo de Kafka, esta obra se extiende sobre si misma como una muy interesante pieza de un surrealismo de Buñuel. El ángel exterminador es el símbolo de la sociedad en decadencia, el guardián de los desechos que terminan por enloquecer al ser humano.

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